Va yá un tiempu grande, abúltame que más d’un añu, anuncié dende esti blogue l’apaición d’un llibru de cuentos en favor de los neños «autistes». N’él participemos un garapiellu escritores de diverses nacionalidaes, Colombia, Panamá, México, España…, coordinaos pol polifacéticu Ruben Serrano, y los beneficios que se sacaren diríen a parar a ProTGD, una asociación de padres y madres de neños con Trestornos del Espectru Autista. Fue una esperiencia perguapa y, según nos comentaron dende la propia asociación, les perres algamaes sirvieron p’alliviar munches de les necesidaes que teníen. Agora, tiempu depués, presenten a «CuentAutismo» a los Premios d’Unicef España. Unos premios que van empobinaos a destacar el trabayu de persones o instituciones «que contribuyen de manera significativa a cambiar la vida de los niños más vulnerables y lograr avances en la defensa de los derechos de la infancia«. Cuido que la competencia pa ganar el premiu seya grande, de magar muncha xente de bon corazón trabaya pa esos oxetivos, pero solo’l fechu de participar ye pa min un arguyu. P’acompañar la presentación de «CuentAutismo» pídennos una carta personal dirixida al Xuráu de los premios, falando de la nuestra aportación a tan prestosa causa. La mía ye como sigue:
Miembros del Jurado del Premio Unicef España.
Señoras y señores:
Me piden de la Asociación ProTGD unas letras sobre mi aportación al libro de cuentos “CuentAutismo”, y cómo pudo contribuir ello en la mejora de la vida de los niños autistas. Me gustaría poder decir que, gracias al libro, esa mejora se ha producido. Que por un lado la recaudación, aunque modesta, de su venta ha servido para poder comprar elementos o utensilios que faciliten el desarrollo de su vida diaria, y que por otro, los niños han sentido de cerca el calor de la amistad y de la solidaridad de los que nos hemos unido en esta maravillosa causa. Pero ignoro si eso ha sido así. Los aspectos “materiales” del asunto sé, por esos abnegados padres de la Asociación, que han contribuido a esa mejora, pero ¿quién puede entrar en la mente y en el corazón de esos niños y niñas tan especiales para saber si han sentido nuestro calor?
Sin embargo, no quiero engañarles. El mayor fruto de esa mi modesta colaboración en el libro no es lo que yo he podido aportar, sino por el contrario, lo que ella me ha aportado a mí. Porque desde que me documenté para conocer un poco mejor a esas personas tan especiales, hasta el mismo hecho de vivir, por medio de la escritura, sus problemas, todo ello me ha hecho mejor. Mas comprensivo. Más humano.
Quizás esto pueda sonar un poco “cursi”, o algo exagerado, pero creo que de la lectura de los cuentos, de todos los cuentos, se desprende el amor con el que están escritos y lo profundo que han calado en nosotros esos padres y esas criaturas que, aunque por fuera no lo parezca, tienen una vida interior posiblemente más rica que la nuestra. La opinión y el premio de ese Jurado son de muy alta estima, pero no hay mayor premio ni mayor estima que conocer y poder colaborar con este mundo tan desconocido para muchos que es el Autismo. Con eso ya estamos satisfechos.
Muchas gracias por su atención y un cordial saludo.
Vicente García Oliva
Autor de “Páginas del Diario de Simón”
